1 de noviembre de 2011

[Análisis] Darksiders: The Wrath of War (Krower's Time)

Aquí traigo de la mano de Krower el gran Darksiders: The Wrath of War, un juego lanzado para PS3, XBox360 y PC por Vigil Games en enero del 2010, tras algún que otro retraso. Ahora también están anunciando ya la secuela, que está prevista para el 2012 (pudimos ver algo en el Gamefest del pasado mes de octubre)

Krower lo jugó hace mucho en PC, más o menos cuando lo sacaron, pero hasta ahora no lo había comentado por aquí.



En líneas generales
Bueno, Darksiders es un juego de acción pura y dura, donde tomaremos el control de Guerra, uno de los Cuatro Jinetes del Apocalipsis. Pero aquí Guerra es acusado por el Consejo Abrasado de adelantar el Apocalipsis, por lo que será desterrado a la Tierra sin sus poderes. Obviamente, alguien le ha tendido una trampa y Guerra buscará al responsable.
Decir que aquí hay mucha ambientación bíblica o mitológica, a pesar de que los Jinetes presentados en el juego (Disputa, Guerra, Furia y Muerte) no son exactamente los originales (Hambre, Guerra, Peste y Muerte).

Como eres la Guerra es obvio que vas a ser protagonista de lucha y lucha y más lucha, aunque también hay cabida para puzzles y plataformeo, mezclando un total de tres géneros de modo convincente.

Nos moveremos en un mundo postapocalíptico en el cual nuestro protagonista (cuyo look recuerda, por lo menos a mí, un poco al Rey Lich del WOW con ese pelo blanco y esa cara de mala uva), se enfrentará a demonios, ángeles y bastantes criaturas que parecen sacadas de la más profunda pesadilla. La única ayuda que tiene es la de su fiel caballo Ruina, al cuál sólo podremos montar en espacios abiertos y no al principio del juego.



La opinión
Krower destaca principalmente la jugabilidad, la ambientación y la originalidad de la temática, puntuando sólo negativamente el estilo de lucha de los bosses.
Darksiders ofrece un manejo muy cómodo, alternando entre la tercera y primera persona (en el segundo caso, para apuntar con más precisión). Los enemigos tienen una IA muy buena y, al contrario que los bosses, no repiten las secuencias de ataque, dando menos sensación de estaticidad. Para Krower, los bosses son demasiado estáticos, repiten mucho las secuencias de ataque, recordando a los bosses muy vistos ya en juego de plataformas que, una vez que te aprendes su patrón, te lo cargas en un pliqui. No es así en cuanto a diseño y esque ahí se salen todos. De hecho muchos son en plan mitológico, algo que les gustará a los amantes de la mitología.
Guerra es un personaje muy carismático y puede luchar tanto a pie como montado en su caballo, algo que a Krower le ha gustado mucho.

Los escenarios son la leche aunque un poco cerrados, en el sentido de "Puerta cerrada que abrirá haciendo tal cosa" siendo la parte de puzzle del juego. Sin embargo, estos paisajes están también megacurrados, como todo los diseños. Esto es aplicable también a los efectos y sonidos, incluyendo la música, que serán acordes a lo que veamos.


A lo largo de la aventura Guerra irá adquiriendo nuevas habilidades y poderes (más bien recuperando lo que es suyo) como son: Forma del Caos, Vuelo de las Sombras... a la par que obtendrá nuevas y cada vez más poderosas armas, como la Hoja Cruzada, la Segadora, Misericordia o el Guantelete Sísmico, entre otras.

Conclusión

A Krower le ha gustado muchísimo, siendo sus puntos fuertes la jugabilidad, la ambientación y lo original de diseños de personajes, entornos e historia. Una buena forma de descargar tensiones y metiéndote en la piel de un Jinete, algo que a todos siempre nos ha llamado la atención, por lo menos a mí. Tendrás lucha, plataformas y puzzles en un mismo juego, con una estética brillante y currada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario