7 de enero de 2012

[Análisis] Wii Party




Con el motivo de la Navidad, el pasar más tiempo con la familia y amigos, se nos ha anunciado mucho en la tele este juego, del que ya llevábamos tiempo jugando en casa y que, por causas varias, aun no había hablado de él por aquí.
Wii Party es esencialmente para lo que se ha anunciado: entretenimiento, pensado para jugar acompañado y echarte unas buenas risas con sus múltiples minijuegos, que no son pocos.


Nada más empezar se nos mostrará un menú por el que nos agrupan los juegos dependiendo del número de jugadores para los que estén destinados: de 1 a 2 o de 2 a 4 junto con la duración estimada de cada uno. Así, tendremos multitud de posibilidades para disfrutar con la familia y, además, conforme vayamos jugando, se nos irán desbloqueando nuevas dificultades y minijuegos ocultos, de modo que la diversión parece no tener fin. Como es lógico, en este tipo de juegos, los Mii nos representarán, añadiendo más encanto al título.

Principalmente, los juegos del menú engloban un cometido principal y, para cumplirlo, deberemos jugar a minijuegos, la mayoría cooperativos, para poder cumplirlo de un modo más sencillo. Así, en el Barco Balancín, si lo hemos hecho mal se nos "castigará" dándonos Mii de distinto tamaño que serán más difícil de colocar en el barco sin que se caigan al agua. En cambio, por hacerlo bien, se nos recompensa con Miis de igual tamaño que, obviamente, serán más fáciles de colocar.
Por otro lado, tendremos pruebas más competitivas. En el caso de Emparejados, tendremos que utilizar nuestra memoria para emparejar a los Mii esparcidos por la plaza, siendo el que más parejas consiga hacer el ganador. Para ello, triunfar en los minijuegos puede ser muy decisivo, ya que nos aumentarán las posibilidades en nuestro turno en el caso de fallar.


Otro caso es el Bingo. Si somos los primeros en cantar líena ganaremos, pero también nos harán pasar por  minijuegos para decidir quién juega con ventaja.
En La Fiesta en Casa, no nos limitaremos a apuntar y hacer, sino que nosotros jugaremos físicamente en la sala; por ejemplo, en el escondite, uno de los jugadores tendrá que esconder el/los mando/s por la habitación y el resto tendrá que intentar localizarlos, tardando lo menos posible porque, conforme pase el tiempo, los puntos aumentarán para el que los haya escondido. El que más puntos tenga, gana la partida.


Un punto más a su favor es que sólo necesitaremos el WiiMote para jugar, sin Nunchuk ni Online, características que lo hacen fácil, rápido y cómodo.
Obviamente, estamos ante un título muy adecuado para cualquier edad y si tenemos gente en casa, pues no deja sitio al aburrimiento. Es muy desternillante. Hay que jugarlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario